Adolfo Suárez abandonó la Unión de Centro Democrático (UCD) el 28 de julio de 1982. Pocos días después, el 31 de julio, anunció la creación de un nuevo partido político, el Centro Democrático y Social (CDS). Este anuncio se produjo tras su dimisión como presidente del Gobierno y como líder de UCD. Finalmente, Suárez se presentó a las elecciones de octubre de 1982 con el CDS, siendo elegido diputado por Madrid.
No hubo una única causa, la deteriorada situación por la
que pasaba su partido, UCD, ya que había multitud de discrepancias. Además, hay
que sumarle el ruido de sables en los cuarteles y la desgastada relación de
Suarez con el rey. Por sus palabras dio pie a pensar que renunciaba por la presión
de los militares. Y que su marcha era “mas beneficiosa para España” que su
permanencia como presidente.