miércoles, 29 de mayo de 2019

PIMIENTOS RELLENOS


Hoy vamos a escribir sobre una receta muy jugosa, apetitosa, alimenticia y ligera donde las haya, y fácil de hacer. Son los famosos pimienticos del piquillo rellenos de carne picada.
INGREDIENTES
·         16 pimientos del piquillo (los que acaban en punta y son conos rojos huecos; se compran en conserva, preferiblemente de cristal.)
·         ½ kilo de carne picada. Lo normal es que sea mitad de ternera, mitad de cerdo, pero si os da por usar pollo, pavo, o sólo ternera, o solo cerdo, o la carne que más os guste, pues adelante.
·         2 cebollas.
·         2 dientes de ajo.
·         1 vaso de salsa de tomate, o de tomate triturado. No añadir tomate frito ya hecho, no queda igual.
·         ½ copa de coñac (de batalla, del barato, por supuesto.)
·         ½ vaso de nata líquida.
·         Sal.
·         Pimienta.
·         Aceite de Oliva
·         2 huevos.
·         Harina. 


PREPARACIÓN

  1. Picamos la cebolla y los ajos, bien picados.
  2. En  la sartén, previamente precalentada, echamos un chorreón de aceite de oliva, y a continuación vertemos los ajos y la cebolla picados. Fuego bajo/medio, dejamos que se pochen, y cuidado con los ajos no se quemen.
  3. Después echamos la carne picada. Hay que procurar que la carne esté recientemente picada y lo más fresca posible. Añadir ahora sal y pimienta negra molida al gusto.
  4. Removemos bien durante cinco minutos, para deshacer los mazacotes de carne que se formarán de primeras, y para que el relleno se integre.
  5. Como seguramente la carne picada se pegará un poco a la sartén, porque es lo propio de la carne muy desmenuzada, a continuación echamos la media copita de coñac y un poco de agua, primero para darle sabor a la carne, y segundo para integrar esos pegotillos semiabrasados que añadirán mucho sabor al relleno.
  6. Se deja reposar el tiempo necesario para que el alcohol y el agua evaporen: no hay cuidado, el relleno no llevará un gramo de alcohol porque es lo primero que se evapora. Pero será necesario que pasen unos tres minutos como mínimo cocinándose.
  7. Cuando el relleno ya está consistente y no hay rastro de agua ni de humedad en el mismo, entonces echamos el medio vaso de nata líquida. Lo que pretendemos con esto es darle cremosidad al relleno.
  8. Removemos bien para que se integre en la masa del relleno, y aquí volvemos a sazonar con sal y pimienta al gusto, porque si no la nata añadirá dulzor a la mezcla.
  9. Dejamos cocinar la masa durante cinco minutos hasta que reduzca y se forme un relleno consistente y cremoso. Dejaremos reposar una media hora para que pierda calor.
  10. Pues bien una vez llegados aquí, lo que haremos será preparar en una fuente los pimientos separados, y sin el jugo de la conserva, y rellenaremos con ayuda de una cuchara, cada pimiento con la masa de carne cocinada, apartándolos en otra fuente hasta terminarlos todos.
  11. Una vez rellenos los pimientos, ya se podrían comer, pero absteneos insaciables, la receta aún no está terminada, porque a continuación rebozaremos con harina y huevo –y con cuidado– los pimientos rellenos y los freiremos en la sartén con aceite muy caliente, hasta que cojan el color dorado que más nos guste: poco hechos, bien hechos, muy hechos. Al gusto. La enciclopedia de los gustos todavía está por escribirse, y deberá tener tantas entradas como personas hay en el planeta Tierra… o sea, que nunca se escribirá. 
  12. Recordemos conceptos: «Enharinar»: se pasa por harina lo que queremos freír, y en directo a la sartén. «Rebozar»: se enharina el producto, se pasa por huevo, y a continuación se fríe. «Empañar»: enharinamos, lo pasamos por huevo, y por último, lo pasamos por pan rallado -siempre en este orden-, y a continuación lo freímos.
  13. Una vez terminados de freír los pimienticos, los dejamos reposar en papel de cocina para que pierdan aceite, y los presentamos en una fuente, esperando una media hora para que pierdan calor, y luego a comerlos, que siempre es lo mejor de todas las recetas.

Y nada más por hoy; como siempre desearos buen apetito, buen provecho, y que seáis muy felices comiendo buenos alimentos. 

JRC