La cárcel de Torrero de Zaragoza, fue inaugurada por el dictador Primo de Rivera el 5 de octubre de 1928, el mismo día curiosamente que la Academia General Militar.
el 31 de julio de 2001, la obsoleta cárcel de Torrero, fue por fin clausurada, algunas voces que clamaban por la conservación del edificio atendiendo a sus valores arquitectónicos y a su carácter simbólico, no han sido escuchadas, sino parcialmente.
Definitivamente la cárcel de Torrero no se benefició de una amnistía plena. si muchos de sus desdichados inquilinos habían caído delante de un piquete. torrero acabó en manos de la piqueta.
la capacidad originaria de la cárcel era de 150-250 reclusos, según fuentes, aunque el culmen lo tuvo en 1939, poco después del fin de la guerra, con 4470 reclusos.
Las celdas tenían ocho metros cuadrados y, en plena Guerra Civil, en algunas de ellas llegaron a hacinarse hasta 20 presos. Cada mañana, un grupo de encarcelados era conducido hasta las tapias del cementerio frente al pelotón de fusilamiento. Y, cada mañana, el padre Gumersindo de Estella les acompañaba.
Este centro penitenciario de infausto recuerdo acogió a lo largo de la historia, además de reclusos comunes, a miles de presos políticos y sociales. Apenas 2 años después de su apertura, sus celdas sirvieron para custodiar a buen número de opositores, a la monarquía, encartados en la "sublevación de jaca".
Ahora solo queda en pie parte de un edificio neomudéjar que se ha convertido en el Centro Social Okupado Kike Mur. En la plaza de la Memoria Histórica, alguien ha colocado en la fachada de la cárcel una placa con la bandera republicana en la que puede leerse "En reconocimiento a todos los los luchadores por la libertad represaliados en este espacio, 14 de abril". Entre los muros de la prisión hay ahora clases de aragonés, peluquería gratis, talleres de reparación de bicicletas y conciertos.
MAG