El origen de
los
polvorones procede de la comunidad andaluza y,
concretamente de la Estepa, donde, desde el siglo XVI era habitual usar manteca
de cerdo en repostería gracias a la abundancia de encinas en los bosques,
hábitat en el que se criaba este animal. De hecho, las referencias históricas
se recogen en un documento de venta de Estepa que la Orden de Santiago firmó a
favor de un banquero genovés en 1559, donde Tristán Gómez era testigo como
oficio de repostero. No obstante, fue en el siglo XIX cuando Filomena Micaela
Ruiz, conocida como la
Colchona, decidió vender sus mantecados en las
diferentes poblaciones por las que su marido trabajaba como transportista. Para
ello, la mujer se dedicó a elaborar un mantecado que se secara mucho más al
final de la elaboración con el fin de que estos se conservaran en mejor estado
y llegaran frescos a su destino con la característica textura que hoy
conocemos. Así, su producto fue allanando el camino consiguiendo una gran
clientela en las diferentes poblaciones andaluzas.
A principios
del siglo XX, este producto, entre otros dulces, ya estaban presentes en toda
Andalucía. Y en el año 1928 se incorporaron las primeras amasadoras al proceso
productivo incrementando el número de fábricas hasta diez. En esa época, los
fabricantes decidieron crear nuevas marcas de su producto, llegando a elaborar
en 1939 cerca de 400 mil kilos de mantecados.
En los años
50, la emigración contribuyó a que el producto se conociera en toda España y se
disparase su producción, siendo en 1961 cuando Coloma García Artesanos
adquiriese la maquinaria de Eliseo Miquel, artesano que vendía turrones por las
ferias, e iniciara todo un proceso de calidad y dulces navideños tan
reconocidos en la actualidad.
Ingredientes
1.
400 gr de harina
2.
225 gr de manteca de cacao
3.
150 gr de azúcar glas
4.
½ cucharadita de canela en polvo
5.
2 cucharadas de anis
6.
una ralladura de limón
7.
un poco mas de harina y azúcar glas para
espolvorear
Pasos:
1.
vierte la harina sobre la placa del horno y
extiéndela bien. Mete la bandeja con la harina a 150º durante 6 minutos
aproximadamente. El objetivo es tostar la harina un poco. Saca la bandeja a los
6 minutos, remueve bien la harina y métela al horno otros 6 minutos más.
2.
Una vez que sacas la harina tostada del horno, tamízala
sobre un cuenco. Añade canela, el azúcar, la manteca, el anís y un poco de
ralladura de limón. Amasa bien todos los ingredientes. Si decides añadir almendra,
no te olvides de echarla ahora.
3.
Espolvorea una zona de trabajo (mesa o encimera)
con harina, y la masa también. Estírala con un rodillo hasta que consigas una
lámina de 1,5 cm de grosor.
4.
Utiliza cortapastas o molde de galletas circular
y ves cortando círculos de tu masa. Ponlos sobre una bandeja forrada con papel
de horno.
5.
Mete los polvorones al horno 15 minutos a 170º.
Después, al sacarlos, deja que se enfríen. Después, espolvorea con azúcar glas.
JLS