miércoles, 6 de junio de 2018

FUENTE DE LA PRINCESA


La fuente de la Princesa de Zaragoza, conocida también como de Neptuno, fue construida entre 1833 y 1845, se encuentra en el Parque Grande, y es la más antigua de estas fuentes urbanas. Fue construida en la plaza de San Francisco, hoy plaza de España. El emplazamiento fue polémico al construirse donde anteriormente estaba la Cruz del Coso (elemento cristiano) y ahora poner un dios pagano antiguo.

Comenzó su construcción en 1833, como conmemoración del juramento como princesa de la futura Isabel II. No funcionó hasta 1845.

Su autor es Tomás LLovet (Alcañiz 1770-1842). Se construyó por iniciativa del gobierno francés (tras los sitios) entre 1811 y 1812, para dotar a Zaragoza de fuentes monumentales y de uso público. Está inspirada en la fuente de Neptuno de Madrid (1774), aunque menos elegante y más desproporcionada la de Zaragoza.

Consta de un pilón circular en cuyo centro hay un basamento en forma de pirámide truncada, con cuatro grandes delfines en las esquinas para verter los chorros de agua, y doce caños, coronado por un pedestal cilíndrico engalanado con gruesas guirnaldas sostenidas por bocas de león. Sobre esta composición ornamental descansa la estatua, también en piedra, de Neptuno, en pie, con su tridente y el brazo derecho sobre el que cuelga parcialmente el manto.

 En su ubicación original, cumplió su función de abastecimiento de aguas y lugar popular de encuentros hasta 1902, en que fue desmontada y sustituida por el Monumento a los Mártires de la Religión y la Patria. Desde esta fecha hasta 1946, en que fue instalada en el Parque Grande J.A. Labordeta, permaneció desmontada en los almacenes municipales.
Actualmente y tras varios actos vandálicos, está bastante deteriorada.
EP